La separación de una pareja puede ser un proceso complicado, especialmente cuando se trata de la división de bienes adquiridos durante la convivencia. Existen términos legales específicos que deben ser comprendidos para asegurar una división justa y equitativa de los bienes. En este artículo, se explicarán los términos legales más comunes relacionados con la división de bienes tras la convivencia de pareja, con el propósito de ayudar a quienes se encuentran en esta situación a entender mejor el proceso y tomar decisiones informadas.
Abogado especialista en división de bienes en uniones convivenciales.
Un abogado especialista en división de bienes en uniones convivenciales es un profesional del derecho que se encarga de asesorar y representar a personas que han decidido poner fin a una relación de convivencia y necesitan dividir los bienes adquiridos durante esa unión.
En este tipo de casos, el abogado debe tener un conocimiento profundo del régimen patrimonial aplicable a las uniones convivenciales, el cual puede variar según la legislación de cada país o estado. En general, se trata de un régimen de comunidad de bienes, en el que los bienes adquiridos por ambos convivientes durante la unión se consideran propiedad de ambos en partes iguales.
El abogado especialista en división de bienes en uniones convivenciales debe trabajar en estrecha colaboración con su cliente para identificar todos los bienes que deben ser divididos, y establecer su valor para determinar la parte correspondiente a cada conviviente. En algunos casos, puede ser necesario recurrir a peritos valuadores para tasar bienes como inmuebles, vehículos o empresas.
Es importante destacar que la división de bienes en uniones convivenciales puede ser un proceso complejo y delicado, especialmente si existen desacuerdos entre los convivientes. En este contexto, el abogado debe actuar como mediador y buscar soluciones justas y equitativas para ambas partes.
Abogado de familia: Requisitos para la división de bienes luego de una convivencia de pareja prolongada.
En el ámbito del derecho de familia, una de las situaciones más complejas a las que se enfrentan los abogados de familia es la división de bienes luego de una convivencia de pareja prolongada.
La ley establece que, en caso de que la pareja no esté casada, la división de bienes debe realizarse de acuerdo a lo que se haya acordado entre las partes. Sin embargo, en muchos casos, no hay un acuerdo previo y se hace necesario recurrir a la justicia.
En estos casos, el abogado de familia debe demostrar que la pareja ha mantenido una convivencia estable y duradera, lo que se conoce como una unión convivencial.
Para ello, es necesario presentar pruebas que acrediten la existencia de esta relación, como pueden ser recibos de pago de servicios, contratos de alquiler o facturas a nombre de ambos convivientes.
Una vez demostrada la existencia de la unión convivencial, el abogado de familia debe proceder a la división de bienes. En este proceso, se deben identificar todos los bienes que hayan sido adquiridos durante la convivencia y se deben distribuir de manera equitativa entre los convivientes.
Es importante destacar que la división de bienes no se limita a los bienes materiales, sino que también se deben incluir las deudas y obligaciones que hayan sido contraídas durante la convivencia.
Qué pasa con los bienes adquiridos durante la convivencia
Una de las preguntas más frecuentes en el ámbito del derecho de familia es: ¿qué sucede con los bienes adquiridos durante la convivencia?
En muchos países, la respuesta depende de si la pareja estaba casada o no. En el caso de parejas casadas, los bienes adquiridos durante el matrimonio se consideran bienes gananciales y, por lo tanto, se reparten por igual entre ambos cónyuges en caso de divorcio.
Sin embargo, en el caso de parejas de hecho o convivientes, la situación puede ser más compleja. En algunos países, como España, existe una figura legal llamada “sociedad de gananciales”, que se aplica a las parejas que han formalizado su unión mediante escritura pública. En este caso, los bienes adquiridos durante la convivencia se consideran bienes comunes y, por lo tanto, se reparten entre ambos miembros al momento de la separación.
En otros países, como Argentina, la situación es diferente. En este caso, los bienes adquiridos durante la convivencia se consideran bienes propios de cada miembro de la pareja, salvo que se haya acordado lo contrario mediante un contrato de convivencia o escritura pública.
Es importante tener en cuenta que, en caso de no existir un acuerdo previo, la división de los bienes puede generar conflictos y desacuerdos entre los miembros de la pareja, por lo que se recomienda siempre formalizar la unión mediante un contrato o escritura que establezca las condiciones de la convivencia.
Abogado especializado en la Distribución de Bienes en Separaciones de Parejas
En casos de separación de parejas, la distribución de bienes suele ser uno de los temas más complicados de resolver. Para ello, es importante contar con un abogado especializado en la distribución de bienes en separaciones de parejas que pueda asesorar y representar a las partes involucradas.
Este tipo de abogado tiene experiencia en resolver disputas entre las partes en cuanto a la propiedad de bienes, inversiones, cuentas bancarias, entre otros. Además, puede ayudar a negociar acuerdos entre las partes en un ambiente de respeto y equidad.
Es importante destacar que, en muchos casos, la ley establece reglas claras en cuanto a la distribución de bienes en separaciones de parejas, por lo que el abogado especializado en este tema puede informar a las partes sobre sus derechos y obligaciones.
Un ejemplo de distribución de bienes en una separación de parejas puede ser el siguiente: Si una pareja ha comprado juntos una casa, pero solo uno de ellos ha pagado la hipoteca, el abogado puede ayudar a determinar cómo se dividirá la propiedad y quién será responsable de pagar la hipoteca restante.